Benchmarking: Qué es y cómo aplicarlo en tu estrategia

 “Lo que no se mide, no se puede mejorar”, una frase atribuida al consultor y economista Peter Drucker, misma  que cobra sentido si lo que buscas es mejorar el posicionamiento de tu marca frente a la competencia.

Lo anterior es justamente lo que busca el benchmarking, que en español se podría traducir como comparación o referencia. Es decir, utiliza una serie de empresas como referencia para comparar y buscar para mejorar de la nuestra.

¿Qué es el benchmarking?

El benchmarking es un proceso continuo de investigación, análisis y comparación de nuestra empresa con los competidores directos y líderes de nuestro mercado. Con esto, se busca de forma eficaz medir el éxito de su empresa comparándola con sus competidores.  Al hacer esto, obtendrás más información sobre lo que tu empresa está haciendo bien y lo que podrías mejorar.

En palabras más sencillas: comparamos nuestras decisiones con las de nuestros competidores, para aprender y mejorar.

¿Por qué es importante el Benchmarking?

Existen muchas razones por las que el benchmarking es importante. Ya que este proceso te permitirá identificar las áreas en las que tu empresa necesita mejorar. Asimismo, puede ayudarte a comparar su progreso a lo largo del tiempo y obtener información valiosa que te guiará a la toma de decisiones informadas sobre tu negocio.

Aquí algunos puntos importante por las que el benchmarking puede ayudarte.

• Impulsa la innovación y la creatividad.
• Crea un proceso más eficiente de mejora continua y resolución de problemas.
• Actualiza y pone al día a tu empresa o producto con las mejores prácticas del mercado.
• Disminuye las posibilidades de cometer errores y ayuda a tomar mejores decisiones.
• Te presenta las prácticas y estrategias exitosas de empresas mejor posicionadas.

Benchmarking: ¿cómo aplicarlo en tu estrategia?

Independientemente de la industria a la que te dediques, todas las empresas buscan maximizar sus ganancias y exposición utilizando los procesos más eficientes posibles. Para lograr esto, muchas utilizan el benchmarking en su estrategia. A continuación, te decimos cómo hacerlo parte de tu estrategia.

Elige el tipo de benchmarking que harás

Existen muchas formas de realizar el benchmarking, algunos pueden ser más efectivos que otros para ayudarte a lograr tus objetivos, según la industria de su organización.

Benchmarking interno

Este primer tipo de benchmarking es bastante sencilla. Aquí se buscan comparar procesos o tareas similares dentro de tu empresa o comercio. Esto necesitará un seguimiento de las métricas de estos sistemas o departamentos comparables, para que los parámetros, mejor conocidos como KPI (Key Performance Indicator), mejor conocido como indicador clave o medidor de desempeño,  pueda evaluar y compararse.

Con esta comparación se logrará establecer y cumplir estándares en todos los ámbitos, estableciendo consistencia y asegurando que cada área sea lo más eficiente posible.

Benchmarking externo

Con este segundo tipo de benchmarking buscarás comparar un proceso interno con el de un competidor, incluso con varias otras organizaciones. Este enfoque puede ser un poco más complicado porque requiere acceso a datos de la industria o datos específicos de la empresa, que pueden no estar disponibles a menos que la otra organización haya aceptado compartirlos contigo.

La evaluación comparativa externa es extremadamente valiosa. Puede comprender mejor dónde encaja su negocio en el mercado más amplio e identificar áreas de debilidad en las que debería centrarse.

Benchmarking competitivo

Benchmarking competitivo se refiere a un tipo de evaluación comparativa externa que buscará enfocarse  en analizar  sus propios procesos y métricas con los competidores directos.

Este benchmarking es importante porque puede identificar exactamente por qué un competidor tiene éxito o qué impulsa la satisfacción del cliente en su industria.

Benchmarking de rendimiento

Otro tipo de benchmarking importante es el que está relacionado con el rendimiento empresarial. Donde, mediante el seguimiento de métricas y KPI dentro de la empresa, los equipos pueden continuar comparando los resultados anteriores con los estándares actuales, lo que ayudará a actualizar continuamente el estándar para mejorar el rendimiento.

Este tipo de benchmarking se centra en mejorar las funciones comerciales clave a lo largo del tiempo, ya que la idea es que las evaluaciones comparativas continúen fortaleciéndose.

Benchmarking estratégico

El benchmarking estratégico suele ser externa y analiza específicamente cómo otras empresas lograron tener éxito. Se busca responder: ¿Qué tipo de estrategias comerciales emplean? Por ejemplo, ¿qué es lo que tiene éxito en sus campañas de marketing?

Con este tipo de benchmarking  se lograría crear estrategias que pueden ayudarte a entender  lo que ha funcionado para ganar terreno dentro y fuera de tu industria.

Esto suele ser  especialmente útil para nuevas empresas o nuevas empresas.

¿Cómo hacer un buen benchmarking?

Para tener éxito al crear el benchmarking para tu negocio o empresa, necesitarás objetivos claros para aprovechar los datos de la competencia. Antes de comenzar tu investigación, necesitará saber qué puedes mejorar en tu negocio.

1. Como primer paso, enfócate en empresas que sean el referente en los asuntos que pretendes mejorar.
2. Identifica al menos 3 empresas que te inspiren y estén relacionadas con la cultura de tu empresa o producto.
3. Reune la información y examina los datos recopilados.
4. Compara los resultados recopilados con las prácticas actuales de su empresa.
5. Elaborar un informe que describa las conclusiones recogidas a lo largo del proceso.
6. Presenta las ideas que tienen sentido implementar y que agregarías a tu área.
7. Ahora, aplicar las estrategias y proyectos aprobados, monitorear y evaluar resultados positivos.

Mejores prácticas para hacer un buen benchmarking

Además de seguir los pasos que arriba enlistamos, valdría la pena que durante el desarrollo y definición del tipo de benchmarking que harás, puedas tomar como referencia las siguientes ideas relacionadas.

• ¿Cómo funciona la jerarquía en tu negocio o empresa y cuáles son las descripciones/asignaciones de trabajo para cada puesto?
• ¿Qué KPI utilizas para medir los resultados?
• ¿Qué herramientas tecnológicas utilizas para aumentar la eficiencia en tus operaciones?
• ¿Cuáles son sus mejores proveedores y cuál es su ventaja única? Y, ¿cuál es su mejor proveedor y por qué?
• ¿Cuál es el presupuesto que manejas mensualmente?
• ¿Cuáles son las medidas de reducción de costes que han estado funcionando?

Conclusión

Incluir un en tu estrategia esta evaluación comparativa, o  benchmarking, te ayudará a identificar dónde se encuentra tu empresa/negocio, comparándolo con el obejtivo que deseas alcanzar.

Sin duda, será un excelente punto de partida si buscas mejorar cualquier proceso en tu estrategia de marketing o modelo de negocio, ya que podrás focalizar los puntos que necesiten cambios o refuerzos.

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